Al abrir un restaurante, es muy importante encontrar maneras eficientes de reducir los costos de producción. Llevar un control de porciones de cada alimento en el menú es clave para evitar desperdicios y disminuir gastos.

Preparar recetas “al tanteo” es un hábito común en la cultura gastronómica. Sin embargo, hacer esto en un restaurante puede llevar a grandes pérdidas innecesarias de dinero y problemas en la administración y operación de tu negocio.

Cuando se habla de cocinar a nivel profesional, debe haber un estándar definido de las porciones exactas de cada ingrediente en cada alimento de la carta.

Conoce algunas técnicas para llevar un mejor control de los gastos de tu restaurante.

Estas cinco estrategias te ayudarán a lograrlo exitosamente: 

1. Utiliza tarjetas que desglosen cada elemento del menú – Especifica por escrito la cantidad exacta de los ingredientes que conforman cada platillo supervisa que el personal se apegue a ella.
2. Evalúa los platos que regresan a la cocina – Revisa si hay alguno que regrese constantemente con comida sobrante y haz los ajustes correspondientes a la receta.
3. Mantén la báscula bien calibrada – Si la báscula funciona correctamente, evitas variaciones e inconsistencias en la preparación de las recetas. Esto es especialmente importante cuando un platillo lleva un ingrediente costoso.
4. Utiliza recipientes estandarizados – Cuida que el personal utilice siempre tazas y cucharas medidoras con cantidades claras.
5. Realiza pruebas de los platos en tamaños diferentes – Si la porción más grande es la más adecuada para cierto platillo, asegúrate de ajustar el precio de forma que corresponda correctamente al costo de los ingredientes.

Llevar a cabo estas recomendaciones no solamente brinda un ahorro económico significativo, sino que también beneficia a tu restaurante en otro aspecto fundamental: la experiencia del cliente.

Al consumidor le gusta saber qué esperar, la estandarización de platillos le da la certeza y familiaridad de recibir siempre el mismo plato tal y como lo conoce. Esto es esencial sobre todo si tu restaurante cuenta con varias sucursales, así aseguras siempre la misma versión de los platillos en cada una y mantienes la satisfacción del cliente.

¡Así que ya sabes! Llevar un control de porciones es indispensable para mantener la rentabilidad y el éxito de tu restaurante a largo plazo. También es una manera eficiente de tener un equipo de trabajo más comprometido con su práctica, de agilizar los tiempos de producción y de tener un mayor control administrativo.

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